
En Sid Meier’s Civilization 7, la competencia entre civilizaciones sigue siendo un sello distintivo, haciendo eco de los desafíos enfrentados en iteraciones anteriores. Los jugadores deben administrar hábilmente sus recursos para formar alianzas o participar en guerras con civilizaciones rivales, todo mientras se esfuerzan por lograr la victoria a través de varios caminos. Sin embargo, los jugadores tienen otra dinámica a su alcance: las ciudades-estado reintroducidas, que están preparadas para influir significativamente en el juego en esta nueva edición.
Las ciudades-estado, una característica recurrente en la franquicia Civilization, han experimentado una considerable evolución a lo largo de los años. En Civilization 7, no solo son excelentes aliadas, sino que también ofrecen una profundidad estratégica enriquecida gracias a sus mecánicas renovadas. Estas naciones independientes ahora presentan oportunidades de reclutamiento únicas con cada nueva era, lo que promete mejorar la experiencia de juego en general.
Las ciudades-estado en la civilización 7: una transformación positiva





Los desafíos de las ciudades-estado del pasado
Las ciudades-estado, que se introdujeron inicialmente en Civilization 5, se inspiraron en pequeñas naciones del mundo real que no buscaban el dominio global. Estas construcciones de una sola ciudad poblarían el mapa del juego y presentarían a los jugadores opciones sobre cómo interactuar con ellas (a través de la conquista, la dispersión o la diplomacia para cultivar influencia).Las ciudades-estado aliadas otorgarían bonificaciones adaptadas a sus características únicas, lo que las haría vitales para lograr la victoria en la diplomacia a través de un mayor recuento de votos de la ONU.
Con la llegada de Civilization 6, Firaxis renovó el modelo de interacción entre ciudades-estado. Si bien las ciudades-estado continuaron brindando bonificaciones y delegados para los jugadores, la mecánica cambió. Los jugadores necesitaban enviar enviados para forjar alianzas, y la civilización que poseía más enviados se convertía en el soberano. Esta dinámica agregó una capa de estrategia, ya que los jugadores podían reclutar ciudades-estado para apoyo militar, aunque con opciones de enfrentamiento limitadas.
Un enfoque revitalizado de la civilización 7
En Civilization 7, las ciudades-estado regresan con mucho agrado, pero con un papel significativamente mejorado. Cada era introduce poderes independientes que pueden aliarse con civilizaciones, algunas de las cuales comienzan siendo hostiles mientras que otras permanecen neutrales. Los jugadores ahora deben invertir influencia durante varios turnos para ganar su lealtad, transformándolas en ciudades-estado completamente funcionales tras una persuasión exitosa.
Estas ciudades-estado recién formadas pueden ofrecer una amplia gama de mejoras, incluidas mejoras tecnológicas y edificios únicos. A medida que los jugadores reclutan más ciudades-estado, sus beneficios estratégicos se expanden. Estas alianzas permiten a los jugadores no solo movilizar ejércitos de ciudades-estado, sino también mejorar las capacidades de su propia civilización, lo que prepara el terreno para un mayor crecimiento en el juego. Además, con el contenido descargable (DLC) y las actualizaciones futuras, el potencial para una participación aún mayor de las ciudades-estado es significativo.
Esta iteración establece que las ciudades-estado son más que meras entidades de una sola ciudad; su funcionalidad mejorada otorga a los jugadores recursos cruciales y apoyo en su búsqueda de la dominación mundial. La eliminación de la presión constante para mantener un mayor número de enviados para asegurar alianzas permite a los jugadores concentrarse en estrategias más amplias, como la expansión territorial y la conquista militar. Aprovechar las ventajas de las ciudades-estado aliadas podría muy bien llevar a un poder sin precedentes en el escenario global.
Deja una respuesta