En 2018, Microsoft consiguió un contrato con el Ejército de los EE. UU. para crear un casco de realidad mixta diseñado para ayudar a los soldados en el entrenamiento, los ensayos y el combate operativo. Este casco, conocido como Sistema de aumento visual integrado (IVAS), se basa en tecnologías desarrolladas inicialmente para el proyecto HoloLens, ahora abandonado. Desde su inicio, la iniciativa ha experimentado numerosos desafíos y cambios.
Según un reciente informe de Bloomberg, el ejército estadounidense ha dado instrucciones a Microsoft para que reduzca los costes asociados a los auriculares IVAS con el fin de facilitar el aumento de la producción. En la conferencia anual de la Asociación del Ejército estadounidense, el jefe de adquisiciones Doug Bush afirmó que el desarrollo actual de IVAS “está progresando mucho más favorablemente en comparación con las fases iniciales”, y señaló que “se han abordado muchos problemas”. Subrayó la necesidad de hacer que el dispositivo sea más asequible.
El gobierno de Estados Unidos ha establecido un precio objetivo de “bastante menos de 80.000 dólares” para la unidad IVAS. En la actualidad, el coste estimado de la pantalla de visualización frontal, la batería y la pantalla de información montada en el pecho es de aproximadamente 41.824 dólares. Esta cifra no refleja la totalidad de los gastos, que también incluyen la gestión del programa del Ejército y la ingeniería asociada y el soporte de software de Microsoft.
Microsoft está buscando activamente formas de reducir los costos para cumplir con las expectativas del Ejército. Robin Seiler, vicepresidente corporativo de Realidad Mixta de la empresa, comentó:
“Para reducir los costos en un sistema complejo es necesario realizar un análisis exhaustivo de los componentes y de la mano de obra, así como evaluar la cadena de suministro”, explicó. “Algunas de nuestras estimaciones de costos se basan en las primeras fases de producción, mientras que otras se prevén a lo largo del tiempo”.
Si el sistema IVAS supera con éxito la fase de pruebas con el ejército estadounidense a mediados del próximo año, podrían realizar un pedido de aproximadamente 121.000 unidades, lo que podría generar ingresos superiores a los 21.900 millones de dólares para Microsoft.
Además, el mes pasado, Anduril Industries anunció una colaboración con Microsoft destinada a mejorar la iniciativa IVAS. Como empresa emergente de tecnología de defensa, Anduril está comprometida con el desarrollo de soluciones tecnológicas para las capacidades militares de los EE. UU. y sus aliados. Esta asociación puede resultar decisiva para abordar los desafíos restantes y maximizar las capacidades del sistema IVAS.
Fuente: Bloomberg
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