La meralgia parestésica es una afección complicada que te hace sentir todo tipo de sensaciones incómodas, como hormigueo, entumecimiento e incluso una especie de dolor ardiente, justo en la parte externa del muslo. Es causado por algo bastante específico: el aplastamiento del nervio cutáneo femoral lateral, que es el nervio que permite que la piel del muslo sienta cosas.
El aplastamiento puede ocurrir por varias razones. Tal vez hayas aumentado algunos kilos de más, estés luciendo unos jeans súper ajustados, estés esperando un bebé o estés lidiando con algo como diabetes.
Por lo general, la sensación extraña se adhiere a un solo lado del cuerpo y se vuelve aún más molesta si estás de pie o caminando mucho. Para poner fin a esto, es posible que necesites cambiar un poco tu estilo de vida. Esto podría significar perder algo de peso o deshacerse de esos pantalones ajustados.
Ejercicios de estiramiento para la meralgia parestésica.
1. Estiramiento de inclinación pélvica
Estructurado: para realizar este estiramiento, es necesario acostarse boca arriba con las rodillas dobladas y pies apoyados en el suelo. Al involucrar los músculos abdominales, la parte inferior de la espalda se aplana contra el suelo inclinando ligeramente la pelvis hacia arriba.
Beneficios: este estiramiento en particular es vital para estabilizar y fortalecer los músculos centrales. Se sabe que alivia la presión sobre el nervio cutáneo femoral lateral al garantizar una alineación pélvica adecuada.
2. Estiramiento de rodilla a pecho
Estructurado: Este estiramiento consiste en tumbarse boca arriba y luego llevar una rodilla al pecho mientras la sujeta con las manos. La otra pierna debe permanecer plana o estar doblada por la rodilla. La posición se mantiene por unos momentos antes de cambiar de pierna.
Beneficios: Significativamente, este estiramiento tiene como objetivo aliviar la tensión en la parte baja de la espalda y las caderas, lo que puede reducir la compresión nerviosa.
3. Estiramiento piriforme
Estructurada: Se ejecuta tumbado boca arriba y una pierna cruzada sobre la otra, de manera que el tobillo descansa sobre la rodilla opuesta. Luego se tira suavemente la rodilla de la pierna cruzada hacia el hombro opuesto. Esto se mantiene durante unos segundos y luego se repite en el otro lado.
Beneficios: El músculo, cuando está tenso, contribuye a la compresión del nervio. Estirar este músculo puede disminuir esta tensión y ofrecer alivio.
4. Estiramiento del flexor de la cadera
Estructurado: Para este estiramiento, coloque una rodilla sobre la otra (usando un cojín para mayor comodidad si es necesario), con el otro pie al frente, apoyado en el piso. Las caderas se empujan suavemente hacia adelante hasta que se sienta un estiramiento en la parte delantera de la cadera. Esto se mantiene durante unos segundos y luego se alterna.
Beneficios: Los flexores de la cadera tensos pueden exacerbar la tensión en la región pélvica. Estirarlos ayuda a reducir la presión sobre el nervio.
5. Estiramiento de mariposa sentado
Estructurada: Se realiza sentándose en el suelo, se juntan las plantas de los pies dejando caer las rodillas hacia los lados. Una inclinación hacia adelante desde las caderas aumenta el estiramiento.
Beneficios: Este ejercicio extiende la parte interna de los muslos, las caderas y la zona lumbar. Desempeña un papel crucial en la mitigación de la compresión del nervio.
¿Cuándo deberías realizar estos estiramientos?
El momento para realizar estos ejercicios de estiramiento para la meralgia parestésica debe basarse en su horario diario y en los momentos en que sus síntomas son más notorios.
Por lo general, es aconsejable realizar estiramientos cuando los músculos se hayan calentado ligeramente, lo que puede ocurrir después de una caminata suave o una ducha tibia. Este enfoque contribuye a mejorar la flexibilidad muscular y minimizar el potencial de lesiones.
Los estiramientos matutinos resultan ventajosos para aliviar la rigidez resultante del sueño y promover una mejor circulación sanguínea para el día siguiente. Además, si encuentra que sus síntomas se exacerban después de permanecer sentado o de pie durante períodos prolongados, puede ser muy beneficioso incorporar estos estiramientos en breves descansos a lo largo del día.
Los estiramientos nocturnos también son valiosos, especialmente si ha estado físicamente activo durante todo el día. Estos estiramientos ayudan a la relajación muscular, preparan su cuerpo para una noche de sueño reparador y abordan la tensión acumulada.
Es importante enfatizar la importancia de la coherencia. La realización regular de estos estiramientos, como mínimo una vez al día, puede ayudar eficazmente a controlar los síntomas de la meralgia parestésica.
Deja una respuesta