
El rompecabezas de campo de Silent Hill f presenta a los jugadores una serie de intrincados acertijos que pueden frustrar fácilmente incluso a los jugadores más apasionados. Si se aborda sin conocimientos previos, puede ser uno de los desafíos más exigentes del juego. Experimentar por sí solo no te guiará; comprender las pistas subyacentes es esencial.
En esencia, el rompecabezas consiste en descifrar pistas que te llevan a espantapájaros específicos, a los que debes quitarles espinas. Sin embargo, si eliges mal, recibirás un ataque rápido. Si identificas cada espantapájaros al primer intento sin provocar agresiones, obtendrás el trofeo de Especialista en Acupuntura.
Un consejo crucial: las respuestas correctas siempre incluyen figuras femeninas. Elegir un hombre provocará hostilidad. Además, el último espantapájaros se mantiene constante en todos los niveles de dificultad debido a su importante conexión con una escena cinemática.
Dificultad de la historia
¿Quién eres?
Al entrar al campo, tu mirada se posará rápidamente en el primer espantapájaros, acompañado de una nota que describe la mecánica del rompecabezas: debes extraer espinas de las figuras correspondientes. La primera pista que encontrarás es:
¿Quién eres? ¿Por qué siempre tienes que ser diferente a los demás? ¡Raro!
Identifica el espantapájaros que destaca, lo cual es fácil: el que mira hacia abajo, a diferencia de sus compañeros. Quitar la espina provocará una respuesta física drástica en el espantapájaros, que te guiará hacia adelante. Si te desvías del camino, la niebla te envolverá, devolviéndote sano y salvo al punto de partida, mientras sigues la guía del espantapájaros.
A medida que te adentras en la siguiente sección, encontrarás un segundo espantapájaros que te ofrecerá otra pista:
¿Quién eres? Sinceramente, sin mí no puedes hacer nada.
Para este acertijo, busca al espantapájaros solitario que parece impotente entre la pareja. Al sacarse la espina, se retuerce bruscamente, dando más indicaciones.
Tenga cuidado al navegar. Podría oír pasos amenazantes de maniquíes que se acercan, lo que indica una amenaza acechante. Enfréntete con prudencia, quizás jugando un juego estratégico de «Luz roja, luz verde» con tus perseguidores.
Llegar al tercer espantapájaros presenta otro desafío:
¿Quién eres? Seré tu amigo. Si no, estarías miserablemente solo.
Aquí, elige al solitario espantapájaros sin compañía que te guíe. A diferencia de los típicos rompecabezas de Silent Hill, este tiene más de tres piezas, lo que te arrastra a un misterio aún mayor.
Cuando llegues al cuarto espantapájaros, presta atención a la pista:
¿Quién eres? Dime la verdad. No son más que amigos, ¿verdad? Siempre te he estado observando cuando no mirabas, ¿sabes?
En lugar de buscar directamente a Rinko, concéntrate en el espantapájaros que observas discretamente. Sigue este giro hasta llegar al penúltimo espantapájaros, cuya pista dice:
¿Quién eres? Tú. Sí, tú.
La pista final puede ser desconcertante, pero identifica a Shimizu Hinako acechando en las sombras, sola.
Dificultad difícil
¿Puedes siquiera imaginar cómo me siento?
¿Te imaginas cómo me siento? Pondré mi mejor sonrisa por ahora.
Tu tarea es identificar al solitario espantapájaros cuya máscara refleja felicidad entre sus desolados compañeros. Tras extraer la espina, este espantapájaros te guiará hacia adelante, pero ten cuidado: este modo presenta multitud de emboscadas, lo que requiere que permanezcas alerta mientras avanzas.
Al acercarte al segundo espantapájaros, recibes otra pista desconcertante:
¿Te imaginas cómo me siento? ¿Cómo es haber sido engañada por ti durante tanto tiempo?
Aquí, observe al espantapájaros que muestra traición, diferenciado por su distintiva presentación visual. Encontrar al indicado puede requerir habilidad.
El tercer espantapájaros plantea otro enigma:
¿Te imaginas cómo me siento? Ni una sola vez me miró como te miró a ti. Ni una sola vez.
En este caso, evita los pares y localiza el único espantapájaros que quedó afuera; sigue su dirección hasta que te acerques al cuarto espantapájaros, lo que presenta otro desafío:
¿Te imaginas cómo me siento? Siempre has sido una monstruosidad.
Este mensaje indica que debes identificar al espantapájaros que evita deliberadamente el contacto visual. Pronto llegarás al último espantapájaros, donde te espera el desafío definitivo:
¿Te imaginas cómo me siento? Me lastimaste, e incluso a él también.¿Sabes lo que se siente forzar una sonrisa cuando veo esa cara tuya tan asquerosa?
Recuerda que este último espantapájaros es la misma chica acechante que aparece en niveles de dificultad anteriores. Búscala entre sus sonrientes amigos y avanzarás con éxito.
Dificultad Perdido en la niebla
Hoy es tu funeral
La dificultad «Perdido en la Niebla» transforma el rompecabezas en una experiencia desconcertante, donde los jugadores se pierden físicamente en el paisaje neblinoso. El objetivo sigue siendo el mismo, pero los acertijos se vuelven cada vez más complejos.
La primera pista del espantapájaros dice:
Hoy es tu funeral. Creo que te daré una ovación de pie.
Para descifrar esta pista, identifica al espantapájaros que parece inclinarse, listo para aplaudir. Extrae la espina y prepárate para encuentros inminentes con numerosas figuras hostiles.
A medida que sigas el camino recién designado, descubrirás el segundo espantapájaros, cuya pista dice:
Hoy es tu funeral.¡Qué suerte! Siento como si por fin me hubiera quitado este doloroso peso de encima.
Aunque un espantapájaros parezca apuñalado, sirve como señuelo; en su lugar, busca uno que blande un cuchillo, símbolo de alivio. Al arrancarle la espina, sigue la dirección que indica.
Al llegar al tercer espantapájaros, descifra esta siniestra pista:
Hoy es tu funeral. Le hiciste daño y ahora lo dejas atrás. Espero que sufras por lo que hiciste.
Busca al espantapájaros que no esté fijado en la figura central, la abandonada en el dolor.
Avanzando hacia el cuarto espantapájaros, nos enfrentamos a otro enigma desconcertante:
Hoy es tu funeral. Eras una espina clavada en mi costado. Siempre te interponías entre él y yo.
Evita los espantapájaros con espinas. En cambio, busca a la chica que obstaculiza la relación de otra pareja. Esta pista te guiará hacia tu destino final.
Finalmente, cuando te acerques al último espantapájaros, prepárate para un acertijo particularmente críptico:
Hoy es tu funeral. Adiós, y no vuelvas a aparecer. Ve a lo tuyo, como siempre.
En esta etapa, descubrirás que cualquier selección cercana solo provocará agresión. En lugar de eso, gira a la izquierda hasta que veas al espantapájaros solitario entre la paja; ahí tendrás éxito.
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