
Advertencia: ¡SPOILERS a continuación del episodio 12 de la temporada 5 de 9-1-1: Lone Star!
En el final de la serie 9-1-1: Lone Star, Rob Lowe ha proporcionado información sobre el viaje de su personaje Owen Strand y el razonamiento detrás de la conclusión de su historia. El clímax de la temporada 5 presenta a la tripulación del 126 enfrentando un evento catastrófico, intentando prevenir una fusión del reactor nuclear después de que un asteroide destructivo impacte Austin, Texas. Aunque Owen sufre lesiones durante esta crisis, una secuencia de flash-forward confirma su supervivencia. El giro, sin embargo, llega cuando elige regresar a Nueva York, dejando a Judd (Jim Parrack) para ascender a capitán de bomberos en su ausencia.
El viaje de Owen en Texas llega a su fin
En una conversación con Variety, Lowe habló sobre la decisión de Owen de abandonar Texas, interpretándola como una señal de que su misión estaba cumplida. Desde el principio, los objetivos de Owen fueron reparar sus lazos familiares, rescatar a su hijo y apoyar al equipo de 126 para que alcanzara su potencial. Con estos objetivos cumplidos, está listo para embarcarse en el siguiente capítulo de su vida. A continuación, se presentan las conmovedoras reflexiones de Lowe:
Había completado su misión, su misión del programa, el concepto del programa, y desde el primer momento del piloto, que era: reconstruir su familia, rescatar a su hijo y luego reconstruir la familia destrozada de los 126 en Austin. Y deja los 126 en Austin completamente reconstruidos, completamente funcionales, una gran familia, y lo mismo para su hijo. Y ahora es el momento de que Owen se vaya, porque va hacia el este, al amanecer, no al atardecer, y construya el siguiente capítulo de su vida.
Las implicaciones de la partida de Owen

La presencia de Owen en 9-1-1: Lone Star siempre tuvo la intención de ser temporal, similar a su papel anterior en Nueva York, donde fue fundamental en la reconstrucción de su propio equipo. Aunque encontró un sentido de familia dentro del parque de bomberos de Texas, su eventual regreso a Nueva York era un resultado esperado. Sin embargo, el final de la serie trata esta transición de manera positiva, destacando cómo los 126 siguen agradecidos por las contribuciones de Owen a la hora de dar forma a su comunidad.
Aunque la partida de Owen puede evocar sentimientos de melancolía, el ascenso de Judd significa una renovada sensación de esperanza y progreso para el equipo. Esto es especialmente notable considerando las dificultades que enfrentan personajes como Wyatt (Jackson Pace), quien está paralizado, y Grace (Sierra McClain), cuya ausencia temporal ha sido un desafío. En una nota más positiva, Tommy (Gina Torres) emerge victoriosa en su batalla contra el cáncer, y TK (Ronen Rubinstein) adopta a su hermanastro, Jonah, junto con Carlos (Rafael L. Silva).Estos momentos alentadores en el final resuenan con la influencia duradera de Owen, lo que sugiere que el vínculo que fomentó persistirá incluso cuando siga adelante.
Manténgase atento para más actualizaciones…
Fuente: Variedad
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