
A medida que el video 4K se vuelve omnipresente en el panorama tecnológico actual, es fundamental reconocer que no todos los formatos 4K son iguales. Mi reciente experiencia con la compacta y potente cámara de tablero WolfBox X5 de 3 canales me hizo comprender esto.
Este artículo está patrocinado por WolfBox. Sin embargo, refleja mis opiniones y perspectivas genuinas, que se mantienen independientes incluso en publicaciones patrocinadas.
Cobertura completa con tres cámaras
Si te gusta cantar a todo pulmón en tu coche, quizás quieras desactivar la función de grabación de sonido de la cámara de salpicadero WolfBox X5; ¡quizás te sorprendas al descubrir que tus habilidades de karaoke no están a la altura! Este innovador dispositivo captura imágenes de la parte delantera, interior y trasera, ofreciendo una vista completa de tus experiencias de conducción.
Si bien la pantalla de 2, 5 pulgadas puede no revelar muchos detalles al mostrar las tres vistas de la cámara simultáneamente, las imágenes de alta definición grabadas se ven impresionantes cuando se ven en una pantalla más grande.

Lo que realmente destaca es la impresionante nitidez del metraje 4K, aunque es importante tener en cuenta que no todas las cámaras lo ofrecen. El desglose es el siguiente:
- Cámara frontal: 4K a 30 fps
- Cámara interior: 1080P a 25 fps
- Cámara trasera: 2.5K a 30 fps
Equipada con el sensor SONY STARVIS 2 IMX678, la cámara ofrece una claridad excepcional tanto de día como de noche. El STARVIS 2 Gen2 mejora aún más su rendimiento en condiciones de poca luz. Sin embargo, la cámara trasera ofrecía una visibilidad algo limitada, a menos que hubiera faros brillantes detrás de mí.

En condiciones de luz diurna, las imágenes de las tres cámaras fueron impresionantemente claras y manejaron de manera efectiva el resplandor y la luz solar brillante.

Control intuitivo táctil, por voz y por aplicación
Priorizando la seguridad, la WolfBox X5 permite a los conductores concentrarse en la carretera con 12 comandos de voz para un manejo manos libres. Esta función permite a los usuarios iniciar o detener grabaciones, tomar fotos, administrar el Wi-Fi y alternar las vistas de la cámara sin esfuerzo.

Si bien algunas acciones son accesibles mediante comandos de voz, para ajustar ajustes más complejos es necesario usar la pantalla táctil LCD de 2, 35 pulgadas. Cuatro botones debajo de la pantalla facilitan la navegación por el menú, el desplazamiento y la confirmación de selecciones.

El menú principal permite personalizar zonas horarias, configuraciones de grabación de sonido, resolución, grabación en bucle, GPS y alertas de fatiga, entre otras opciones.

Si bien algunas configuraciones se pueden ajustar a través de la aplicación móvil WolfBox, su función principal es ver y descargar imágenes.
Desafíos para conectarse a la aplicación WolfBox
La cámara de tablero WolfBox X5 funciona bien, aunque la aplicación puede ser lenta y establecer conexiones con lentitud. Su Wi-Fi de 5.8G integrado optimiza el acceso a fotos y videos en la tarjeta microSD incluida (128 GB, ampliable a 512 GB), acelerando la velocidad de descarga.
Sin embargo, tuve dificultades para conectarme al wifi de la cámara; a menudo, tuve que forzar el cierre de la aplicación WolfBox varias veces antes de que reconociera mi conexión. Cada intento tardaba varios minutos, con ocasionales fallos de conexión.
Una vez conectado, pude explorar fácilmente los vídeos y fotos grabados, claramente etiquetados con F, I o R para su identificación. Los archivos se guardan en formatos MP4 y JPG, lo que los hace compatibles con la mayoría de los reproductores multimedia.

La aplicación no solo muestra videos, sino que también integra datos GPS, lo que proporciona la ubicación en tiempo real en la esquina de cada video. Para quienes prefieren una experiencia de visualización más amplia, la aplicación de escritorio WolfBox Player permite acceder a los videos directamente desde el teléfono o la tarjeta microSD de la cámara.
En una nota personal, me resultó más sencillo quitar la tarjeta microSD y descargar los archivos directamente a mi PC en lugar de usar la aplicación móvil.
Ocurrió otro fallo ocasional: la cámara del tablero se congelaba al desactivar el wifi, lo que requería reiniciar el sistema para que funcionara correctamente. Este problema ocurrió dos veces en una semana.
Afortunadamente, las actualizaciones de firmware no requieren la aplicación, ya que la cámara admite actualizaciones por aire (OTA).
Diseño discreto y compacto
Después de organizar todos los cables con cuidado, me sorprendió gratamente el diseño compacto de la cámara de salpicadero WolfBox X5; se integra a la perfección en mi pequeño sedán. El cable de la cámara trasera, que es bastante largo, también debería ser adecuado para vehículos más grandes.

La cámara trasera, aunque pequeña, gira 360 grados para una colocación óptima. Al principio, tuve algunas dificultades para que la lámina electrostática se adhiriera a la luneta trasera, pero una vez colocada, se mantuvo firmemente en su lugar. Por suerte, el kit incluye tres láminas electrostáticas para estos casos.

De igual forma, la cámara frontal ofrece una rotación de 90 grados y se mantuvo firmemente sujeta al parabrisas. Su diseño minimiza el cableado visible, asegurando que no obstruya mi visión.
Una característica adicional que encontré particularmente útil es el puerto USB en el adaptador de corriente, que proporciona una opción de carga adicional para otro dispositivo.
Disfrute de una visión 4K ultranítida

Mi experiencia con la cámara de tablero WolfBox X5 fue maravillosa, gracias a su elegante diseño, su intuitiva interfaz táctil y la impresionante nitidez de la calidad de video 4K de la cámara frontal. Si bien la cámara frontal por sí sola es impresionante, la incorporación de las cámaras trasera e interior mejora su efectividad.
Para cualquier persona interesada, el WolfBox X5 está disponible para su compra a $ 279, 99 directamente desde WolfBox.
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