El 13 de enero, el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, declaró que el personal penitenciario que se encontraba retenido como rehenes finalmente había sido liberado. La noticia fue hecha pública por la agencia penitenciaria SNAI y cubierta por medios de comunicación como WION y The Guardian.
Según ABC News, hasta el 11 de enero, al menos 125 guardias penitenciarios y 14 miembros del personal administrativo fueron tomados cautivos por los prisioneros en al menos cinco cárceles de todo el país. Se encontraban cautivos desde el pasado lunes 8 de enero. Había habido un notable aumento de la violencia en el momento del suceso.
La agencia penitenciaria SNAI dijo que las personas estaban siendo sometidas a exámenes médicos y que investigaría a los responsables de su secuestro, pero no reveló el número de personas que habían sido liberadas. El sábado se había afirmado que, si bien al menos 41 habían sido liberados, los guardias y tres miembros del personal administrativo seguían como rehenes.
Los empleados penitenciarios de Ecuador fueron tomados como rehenes en el marco de una protesta y disturbios.
Según CNN, la agencia penitenciaria nacional anunció el sábado que todos los funcionarios penitenciarios y el personal administrativo que estaban cautivos por los prisioneros en las instalaciones correccionales de Ecuador habían sido liberados.
Según la agencia penitenciaria SNAI, más de 150 miembros del personal fueron tomados como rehenes en varias prisiones el lunes 8 de enero, mientras se producían disturbios civiles en todo el país en Ecuador. ABC7 News informó que, según el Ministerio del Interior, los prisioneros en los centros de detención de Azuay, Tungurahua, Cañar, Cotopaxi y Napo tenían a los guardias y empleados.
El mismo lunes, el presidente Daniel Noboa proclamó un estado de emergencia en todo el país, lo que desató una agitación y violencia generalizadas que llevaron al escenario de los rehenes. La situación de los rehenes en las cárceles de Ecuador ocurrió en medio de una ola de violencia que ha sacudido al país y que incluyó secuestros policiales y atentados con bombas.
Además, según la BBC, los prisioneros supuestamente habían amenazado con matar a los rehenes el mismo día si enviaban personal militar para tomar el control de las prisiones. Además, también fueron capturados cuatro policías .
Además, como informó WRAL, la agencia también ha recibido informes de un altercado armado entre presos y personal de la Policía Nacional y de las fuerzas armadas en una cárcel en la zona sur de El Oro. Además, la cárcel de El Oro había perdido a un guardia penitenciario, según el SNAI.
Según France24, la declaración del estado de emergencia se produjo tras rumores de una fuga de la cárcel de José Adolfo Macías Villamar, conocido como “Fito .” Villamar es el presunto jefe de la pandilla Los Choneros, que al parecer tiene vínculos con el cartel de Sinaloa.
Estaba encarcelado en una prisión de alta seguridad de Guyaquil después de haber sido declarado culpable en 2011 de cargos relacionados con tráfico de narcóticos y asesinato. France24 informó que, según los funcionarios, se han enviado casi 3.000 agentes de policía para detenerlo.
El presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, recibió con alegría la noticia de la liberación de los rehenes y elogió al SNAI, las fuerzas armadas y la policía nacional por su exitoso rescate.
Según WION, en un comunicado oficial, SNAI afirmó que se llevaría a cabo una investigación para identificar a los responsables de la situación de los rehenes.
Según la administración, desde que se declaró el estado de emergencia el lunes, más de 1.000 personas han sido detenidas. Las fuerzas armadas y los organismos encargados de hacer cumplir la ley mantuvieron sus operaciones a nivel nacional.
Además, las fuerzas de seguridad de Ecuador están intentando restablecer el orden en al menos seis cárceles donde estallaron disturbios.
Fito estaba detenido en un pabellón de máxima seguridad y al revisar esa zona no se encontró ninguna evidencia sobre él.
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