
Al principio, creía que la privacidad era irrelevante para mí. Sin embargo, mi perspectiva cambió al descubrir la cantidad de información que Microsoft había recopilado sobre mis actividades en línea. Esta constatación me impulsó a tomar medidas respecto a mi huella digital.
Desvelando los registros ocultos de Microsoft
Durante años, usé Windows sin pensar en los datos que recopilaba. Eso cambió drásticamente cuando accedí al Panel de Privacidad de Microsoft.
Esperando encontrar registros mínimos, me encontré con un vasto archivo de mis actividades. Mi historial de navegación y búsqueda abarcaba varios meses, revelando numerosas búsquedas de Bing que había olvidado e incluso las frases que escribí en la función de búsqueda de Windows.

La sección Aplicaciones y Servicios catalogaba los productos de Microsoft que usaba habitualmente. Además, las correcciones y ajustes de las funciones diseñadas para mejorar la escritura predictiva se almacenaban en Ortografía y Texto. También podía ver una lista de aplicaciones con permiso para acceder a mi cámara, micrófono o ubicación en la sección Acceso a Aplicaciones.

Al explorar las distintas secciones, noté que casi todas contenían información, excepto una. La categoría «Ubicación» estaba inexplicablemente vacía, a pesar de tener los servicios de ubicación activados en mi dispositivo. Sospeché que se debía a que no había usado ninguna aplicación de ubicación, como el servicio meteorológico, que depende de esta función.

Al revisar este extenso registro, me di cuenta de cuánto tenía acceso Microsoft a mis actividades en la computadora. La acumulación de mis búsquedas, aplicaciones e incluso mis hábitos de escritura creó una imagen completa de mi uso. Reconocí que era hora de limpiar estos datos y minimizar la información que Microsoft tenía sobre mi comportamiento en línea.
Cerrando la puerta a la recopilación de datos de Microsoft
Preocupado por los datos que Microsoft había retenido, tomé medidas inmediatas para rectificar la situación. Eliminé todos los registros de mi cuenta y me preparé para evitar una mayor acumulación de datos.

Cómo borrar datos existentes en el panel de Microsoft
En el Panel de Privacidad, pude revisar fácilmente los datos de mi cuenta y eliminar lo que considerara innecesario. Empecé con mi historial de búsqueda y navegación, y posteriormente eliminé los registros de uso de aplicaciones y servicios, así como las entradas de texto.

Lo que una vez fue una larga serie de entradas en mi tablero ahora parecía casi vacío después de mis esfuerzos de limpieza.
Cómo evitar la recopilación futura de datos en Windows
Aunque al eliminar los registros existentes se borró lo recopilado previamente, necesitaba tomar medidas adicionales para asegurarme de que no se siguieran acumulando nuevos datos. Accedí a Configuración de Windows y luego a Privacidad y seguridad. En la sección Diagnóstico y comentarios, desactivé la opción «Enviar datos de diagnóstico opcionales» y la función «Mejorar la entrada manuscrita y la escritura».
A continuación, accedí al menú Discurso y desactivé el Reconocimiento de voz en línea.

Aunque estas funciones puedan parecer beneficiosas, cada una recopila datos adicionales sobre tus actividades. Windows recopila, por sí mismo, una cantidad mínima de información de diagnóstico esencial, que no se puede desactivar en las ediciones Home o Pro. Sin embargo, desactivar las funciones opcionales impide que Microsoft registre detalles adicionales, como el uso de aplicaciones y los patrones de escritura.
Revisar los permisos de la aplicación
En la sección Privacidad y seguridad, exploré los permisos de las aplicaciones. Esta función revela qué aplicaciones tienen permiso para acceder a elementos sensibles como la ubicación, la cámara y el micrófono. Tomé la iniciativa de revocar el acceso a aquellas que no lo requerían.

Mantuve los permisos solo para aplicaciones críticas. Por ejemplo, mi aplicación de videoconferencias necesitaba acceso al micrófono y a la cámara, pero mi aplicación de notas no los requería.
Por último, actualicé mi configuración en el Panel de Privacidad de Microsoft, concretamente en la página de personalización de anuncios. Esta página controla si Microsoft puede usar mis datos para personalizar anuncios en plataformas como Outlook y Bing. Opté por desactivar esta función.

Si bien los anuncios no desaparecieron por completo, reflejaron menos mis búsquedas recientes. Este ajuste redujo la recurrencia de anuncios dirigidos basados en mis actividades en línea anteriores.
Experimentar una cuenta Microsoft más privada
Tras implementar estos cambios, mi Panel de Privacidad se volvió mucho menos intimidante. En lugar de numerosas entradas, solo me encontré con unos pocos registros, lo que indicaba una cuenta más limpia. Los datos que quedaban se redujeron significativamente, ya que mi decisión de desactivar la recopilación opcional de datos minimizó las actividades registradas.

Con el tiempo, noté que los anuncios en plataformas como Outlook y Bing estaban menos relacionados con mis búsquedas recientes. Mi panel de control mantuvo un perfil más claro, con menos entradas atribuibles a búsquedas y correcciones de texto. Al acceder a las aplicaciones, las solicitudes de permisos se ajustaban con mayor precisión a sus necesidades reales, ya que ya había revocado los permisos innecesarios. Mi escritura también disfrutó de mayor privacidad, sabiendo que las funciones de entrada manuscrita y voz ya no enviaban muestras a Microsoft.
A pesar de estos cambios, mi sistema Windows siguió funcionando a la perfección. Las actualizaciones se procesaron sin problemas, las aplicaciones de la Tienda funcionaron como se esperaba y las funciones esenciales permanecieron intactas. El cambio notable no se debió al rendimiento, sino a la reducción significativa de las actividades registradas en mi cuenta. Con la recopilación opcional deshabilitada, me sentí con la libertad de decidir qué aspectos de mis datos Microsoft podía conservar.
Deja una respuesta