Desde su lanzamiento en 2019, los AirPods Pro de primera generación han estado en el centro de la polémica para Apple, principalmente debido a numerosas quejas sobre crujidos y estática. Estos problemas persistentes culminaron en una demanda presentada en noviembre de 2024, en la que se acusaba a Apple de no haber solucionado adecuadamente el defecto.
Sin embargo, recientemente Apple logró un triunfo legal notable, aunque parcial, que limitó el alcance de esta demanda, lo que permitió a la compañía centrarse en las reclamaciones clave.
Defensa limitada de Apple contra alegaciones específicas
Para comprender mejor los acontecimientos de este caso, resumamos los principales sucesos ocurridos:
- La demanda, oficialmente conocida como Lindsey LaBella et al.contra Apple Inc., fue iniciada en el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Norte de California en noviembre de 2024, presentada por nueve consumidores de siete estados diferentes.
- Los demandantes alegan que los AirPods Pro vendidos entre 2019 y 2022 sufrían un defecto de ingeniería que provocaba ruidos de crujido persistentes.
- En respuesta a estas quejas, Apple lanzó una actualización de software en mayo de 2020 y estableció un programa de reparación en octubre de 2020 para resolver los problemas.
- Los demandantes sostienen que si Apple hubiera revelado el defecto antes de la compra, se habrían abstenido de comprar los AirPods Pro, o solo lo habrían hecho con un descuento significativo.
- En marzo de 2025, Apple intentó desestimar la demanda por completo, pero no tuvo éxito.
Recientemente, la jueza Noël Wise emitió un fallo que favorece parcialmente a Apple, lo que resultó en la desestimación de varias reclamaciones de la demanda:
- Reclamaciones a nivel nacional debido a diversas deficiencias.
- Reclamaciones de garantía expresa a nivel estatal.
- Reclamaciones de garantía implícita a nivel estatal.
Además, se denegó la solicitud de los demandantes de una medida cautelar, que pretendía obligar a Apple a “reparar, retirar y/o reemplazar los AirPods Pro y extender las garantías por un período de tiempo razonable”.
Es importante destacar que Apple ahora se enfrenta a la defensa únicamente contra las demandas estatales específicas por fraude por omisión, en las que los demandantes afirman que Apple tenía la responsabilidad de revelar los problemas de seguridad relacionados con los AirPods Pro.
Cabe señalar que, en algunos estados, las reclamaciones relacionadas con la garantía aún pueden ser modificadas y presentadas nuevamente por los demandantes dentro de un plazo de 21 días. Además, para avanzar a la fase de descubrimiento de pruebas, los demandantes deben demostrar que Apple tenía conocimiento del defecto de los AirPods Pro y ocultó intencionalmente información relevante sobre el problema de los crujidos.
Deja una respuesta